Aclaración previa al review:
He decidido seguir un orden de lectura cronológico desde el inicial año uno del encapotado hasta llegar a los confines de su historia personal retratadas en “Batman e Hijo”. Obviamente todo comic “supuestamente” dentro de la continuidad pero que contradiga este ordenamiento es excluido y calificado como fuera del canon.
Particular, y razón de esta aclaración, es la obra reseñada hoy. En este capítulo de “Batman Critic Comics” tengo la ocasión de traerles la review del comic titulado comercialmente como “Batman:Year Two”. Según múltiples fuentes este arco argumental si integra la continuidad (y la cronología), a pesar de tener múltiples detalles que contradicen este hecho, forzándome a incluirla en esta sección a pesar de mis opiniones contrarias. La salvedad unánime que se le puede tomar es el error en el titulo, que solo es de carácter simbólico, ya que la historia ocurre en el año cinco.
"Batman: Year Two"
Sinopsis: El anterior vigilante nocturno de Gotham ha regresado para traer justicia y orden a costa de litros de sangre. Batman ten cuidado, ¡ha vuelto The Reaper!
Comics: Detective Comics 575 al 578
Págs.: 104
Año de Public.: 1987
Critica:
El éxito, tanto de críticas como de ventas, que había tenido DC Comics con la publicación de la excelente “Batman: Year One”, comic que aun hoy es tomado como inicio de todo la continuidad batmaniaca, obligo a los directivos de la editorial a sacar a la calle una secuela. Así fue como se reunió a Mike W. Barr y un grupo de dibujantes (los cuales se destaca Todd McFarlane) y el comercialismo “Batman: Año Dos” salió a la luz con una historia de lo más inverosímil y extraña. Más de un fan del murciélago la recuerda con adjetivos pocos felices.
Spoiler Zone/ El Cegador ha regresado a Gotham, aunque nadie sabía de su existencia pasada o presente hasta ahora, para seguir su carrera contra el crimen que había abandonado hace unos 30 años. Impulsado por la aparición del Caballero Oscuro, vuelve a rondar la noche asesinando con sus dos hoces/pistolas a todo lo que tenga una gota de maldad o inmoralidad (prostitutas incluidas). Sin dudarlo, Batman intenta detenerlo pero el anterior vigilante le da una paliza para el recuerdo, forzando a nuestro héroe a cruzar su auto-delimitada línea moral (si, no le costó mucho). Acto seguido, vemos como un renovado Batman armado y con sed asesina intenta tenderle una trampa al Cegador y atraparlo (o matarlo, en su defecto).
Al fallar nuevamente, no le queda más opciones (¿o sí?) en aliarse con la última persona que uno pensaría en el mundo: un (todavía no suprimido por zero-hour) Joe Chill. Sip, el causante de la muerte de los padres de Bruce. Este nuevo “duo-dinamico” llevara a la trama a un emocionante desenlace donde seremos testigos de una de las escenas más tensas de la pseudo-continuidad.
Pero la obra nos trae algunas cosillas más. ¿Bruce Wayne a punto de casarse con una ex-monja? ¿El Cegador es un anciano? ¿Batman disparando como Bruce Willis a todo lo que se mueve? ¿Y en un momento le dispara a Gordon? ¿Batman disfrazado de operario aéreo? ¿Masacres de mafiosos producto de hoces que se transforman en armas de fuego?...y mucho mas.
Fuera de broma, ver a Batman portando un arma de fuego y a su lado Joe Chill diciendo chistes negros, es más extraño que ver a mi hermanita mas chica fumando marihuana. /Fin Spoiler Zone
Dejando a un lado todo, la historia es muy divertida y la trama mantiene leyendo al lector. Los giros son sorprendentes (y delirantes) llevando todo a un explosivo final. Se le suma a la valoración final un modesto dibujo, ciclotímico a veces por el cambio reiterado de dibujantes, resaltando el trabajo de Todd “Dibujó irreales, pero fabulosas, capas” McFarlane.
Dato loco: el villano The Reaper se adapto en la serie animada de Batman, concretamente en la película “Batman: la máscara del fantasma”.
¿Qué más decir de este “Batman: Year Two”? No es una secuela de “Batman: Year One” y no debe (o debería) entrar en la continuidad.